A las autoridades, policíxs, juecxs, fiscales, peritxs y a tode representante del sistema que nos ha fallado: nos siguen callando, nos siguen agrediendo, nos siguen vulnerando, nos siguen matando.

Hoy nos dirigimos a ustedes para exponer y exigir a la institucionalidad ser eficaces, oportunos, justos y comedidos con nuestras denuncias. Nos vulneran y victimizan una y otra vez, cuando no somos escuchadas, cuando no nos creen, cuando la policía no toma nuestra denuncia, cuando nos mandan de vuelta a casa con el agresor.

Mujeres pobres, precarias, sin apoyo, sin recursos judiciales, sin protección, vulneradas y en riesgos sus vidas, necesitan soluciones a los horrores que se reproducen desde nuestras ancestras y que ahora aqueja a nuestras niñes y sus infancias. Quienes estamos en la primera línea contra los agresores y femicidas vemos una respuesta lenta, inoportuna, insensible y cruel hacia la violencia de género, donde nos ponen en riesgo de muerte vulnerando nuestro derecho a la vida.

No podemos ser acompañadas al momento de denunciar, la fiscalía se demora hasta el último día que este sistema judicial fallido les permite, mientras nos agreden y matan en menos de 90 días. No podemos recibir defensa con perspectiva de género, los municipios con sus programas precarios y lentos no dan abasto ni respuesta, por más que contemos con la voluntad de las funcionarias en comunas como la nuestra, pobres y violentas. Convocamos a todas las mujeres a vincularse de manera afectiva y solidaria, creemos y pulsamos cotidianamente por el trabajo colectivo y solidario, que es y será la única vía de obtener un buen vivir para todes.